Homosexualidad
El día que no se escriba sobre homosexualidad, ese día habrá terminado la discriminación.
Muchos chicos son rechazados por sus pares o sus familiares, por ser gays. Sobre todo por el padre del mismo sexo. Son muchos los casos donde el padre echa al chico de la casa porque este es gay y la mamá, casi siempre es más comprensiva.
¿Qué es un homosexual?
Es una PERSONA. Puede ser mujer u hombre, alto, bajo, gordo, flaco, negro, blanco, amarillo, lindo, feo... que se siente atraído por una persona de su mismo sexo. Esa es la única diferencia que veo... ya que, incluso las prácticas sexuales, en primer lugar, son del ámbito privado, por lo que no creo que me corresponda tocar ese tema; y en segundo lugar, esas mismas prácticas son realizadas también por los que llamamos heterosexuales.
La homosexualidad NO es una enfermedad, por ende no es contagiosa. Es más: creo que todos somos bisexuales y la cultura nos orienta en dónde poner nuestra libido (energía sexual).
Piensen en la infancia: el primer beso puede ser dado por un chico o por una chica. Los niños no notan la diferencia, pero la escuela, los padres, van orientando a que los chicos gusten de las chicas y las chicas, de los chicos. De la misma manera nos orientan con el gusto por los colores... nenas, rosado y varones, azueles. Con toda la gama de colores que tenemos, ¿puede ser que a todas las nenas les guste el rosado? NO.
Muchos chicos son rechazados por sus pares o sus familiares, por ser gays. Sobre todo por el padre del mismo sexo. Son muchos los casos donde el padre echa al chico de la casa porque este es gay y la mamá, casi siempre es más comprensiva. Muchos gustos se heredan... ¿acaso estos padres, tal vez, pasaron por lo mismo? ¿Por qué tanto rechazo? Tal vez por ser… ¿igual que papá?
Otros padres sienten vergüenza por el qué dirán y se olvidan que lo más importante es la felicidad del hijo, no con quién se acuesta.
También creo que a veces cuando los hijos logran llevar una vida homosexual plena sin ocultarse (viven con su pareja, salen, o sea, son felices), a muchos papás les toca pensar qué hubiera pasado si ellos se hubieran animado a ser quienes realmente querían ser... a amar sin barreras.
Sí, las personas son personas. ¿Qué nos importa si la pareja es del mismo sexo o de otro sexo?
También he notado que se habla mucho de la homosexualidad masculina y ésta ha ganado terreno, pero poco se habla de la homosexualidad femenina, que todavía tiene mucho por recorrer. Pero sí muchas mujeres aman a otras mujeres.
Olvídense de los estereotipos de mujer "machona" que gusta de la chica linda... es mucho más simple. Son simplemente dos mujeres, con sus gustos, su vida etc., que se enamoran de otra mujer; lo mismo que pasa entre hombres.
Les cuento que tuve de paciente a un chico brillante que se fue a vivir a Inglaterra, donde obtuvo un puesto muy importante. Aquí el ser gay jugó a su favor, además de su gran capacidad. La empresa estaba feliz de tener dentro de los cargos más importantes a un homosexual, ya que para la misma, era una forma de demostrar que era una empresa “abierta”. Así que a veces, puede ser un punto a favor.
Otra cosa que se escucha muy seguido, es que la homosexualidad se define en la adolescencia. Lo justo sería decir que se re define o sea, que "sale a la luz"; ya que de chiquitos los niños saben si les gusta el dulce de leche o el chocolate, o si prefieren algo salado.... lo mismo que saben si les atrae un chico o una chica. Allí aprenden que ciertos sentimientos, deben ser “escondidos”. Así que ya de chicos, sabemos nuestra orientación sexual.
La homosexualidad no es una elección. Por años he escuchado esta frase. Mis queridos lectores, ser gay no tiene nada de malo o especial, pero sabemos que quien lo sea, es más probable que tenga una vida más complicada, que se lo pre juzgue... que tal vez lo rechacen.
Entonces: ¿quién va a elegir serlo? Esto no se elige, se siente. Te gusta EL o te gusta ELLA... o te gustan ambos (aunque siempre creo que un gusto prevalece sobre el otro).
Si pudiera elegir, hubiera elegido gustar de la persona adecuada, de que me gustaran los alimentos sanos, de poder elegir mis gustos... pero no puedes, simplemente como dicen: “sobre gustos y colores, no han escrito los autores”. Es decir, no podemos decir de qué o de quién gustar.
La homosexualidad NO es una enfermedad, por ende no es contagiosa. Es más: creo que todos somos bisexuales y la cultura nos orienta en dónde poner nuestra libido (energía sexual).
Piensen en la infancia: el primer beso puede ser dado por un chico o por una chica. Los niños no notan la diferencia, pero la escuela, los padres, van orientando a que los chicos gusten de las chicas y las chicas, de los chicos. De la misma manera nos orientan con el gusto por los colores... nenas, rosado y varones, azueles. Con toda la gama de colores que tenemos, ¿puede ser que a todas las nenas les guste el rosado? NO.
Muchos chicos son rechazados por sus pares o sus familiares, por ser gays. Sobre todo por el padre del mismo sexo. Son muchos los casos donde el padre echa al chico de la casa porque este es gay y la mamá, casi siempre es más comprensiva. Muchos gustos se heredan... ¿acaso estos padres, tal vez, pasaron por lo mismo? ¿Por qué tanto rechazo? Tal vez por ser… ¿igual que papá?
Otros padres sienten vergüenza por el qué dirán y se olvidan que lo más importante es la felicidad del hijo, no con quién se acuesta.
También creo que a veces cuando los hijos logran llevar una vida homosexual plena sin ocultarse (viven con su pareja, salen, o sea, son felices), a muchos papás les toca pensar qué hubiera pasado si ellos se hubieran animado a ser quienes realmente querían ser... a amar sin barreras.
Sí, las personas son personas. ¿Qué nos importa si la pareja es del mismo sexo o de otro sexo?
También he notado que se habla mucho de la homosexualidad masculina y ésta ha ganado terreno, pero poco se habla de la homosexualidad femenina, que todavía tiene mucho por recorrer. Pero sí muchas mujeres aman a otras mujeres.
Olvídense de los estereotipos de mujer "machona" que gusta de la chica linda... es mucho más simple. Son simplemente dos mujeres, con sus gustos, su vida etc., que se enamoran de otra mujer; lo mismo que pasa entre hombres.
Les cuento que tuve de paciente a un chico brillante que se fue a vivir a Inglaterra, donde obtuvo un puesto muy importante. Aquí el ser gay jugó a su favor, además de su gran capacidad. La empresa estaba feliz de tener dentro de los cargos más importantes a un homosexual, ya que para la misma, era una forma de demostrar que era una empresa “abierta”. Así que a veces, puede ser un punto a favor.
Otra cosa que se escucha muy seguido, es que la homosexualidad se define en la adolescencia. Lo justo sería decir que se re define o sea, que "sale a la luz"; ya que de chiquitos los niños saben si les gusta el dulce de leche o el chocolate, o si prefieren algo salado.... lo mismo que saben si les atrae un chico o una chica. Allí aprenden que ciertos sentimientos, deben ser “escondidos”. Así que ya de chicos, sabemos nuestra orientación sexual.
La homosexualidad no es una elección. Por años he escuchado esta frase. Mis queridos lectores, ser gay no tiene nada de malo o especial, pero sabemos que quien lo sea, es más probable que tenga una vida más complicada, que se lo pre juzgue... que tal vez lo rechacen.
Entonces: ¿quién va a elegir serlo? Esto no se elige, se siente. Te gusta EL o te gusta ELLA... o te gustan ambos (aunque siempre creo que un gusto prevalece sobre el otro).
Si pudiera elegir, hubiera elegido gustar de la persona adecuada, de que me gustaran los alimentos sanos, de poder elegir mis gustos... pero no puedes, simplemente como dicen: “sobre gustos y colores, no han escrito los autores”. Es decir, no podemos decir de qué o de quién gustar.
¿Es tratable la homosexualidad? NO.
Como dije más arriba, no es una enfermedad y lo único que puedes lograr en una terapia, es abstenerte de pasar bien y hacer uso de tus derechos, o sea el derecho de ser persona y gustar de la persona que más te guste.
Así que por favor, empecemos a dejar de señalar, para evitar que nos señalen... dejemos que las personas hagan uso de la libertad que tenemos desde que nacemos, y es, el derecho a ser personas: a amar, a ser amado y respetado.
Tu hijo/a, tu padre, tu madre, tu amigo/a, tu hermano/a , tu tío/a pueden ser lo que deseen en la vida y sobre todo, personas de bien... como todos, estamos en este camino a la felicidad.
Si la felicidad viene de la mano de alguien del mismo sexo, es algo que con el tiempo será natural... ya la misma existe desde que el mundo es mundo: somos libres de amar y ser amados.
Viviana Vaisenberg
Así que por favor, empecemos a dejar de señalar, para evitar que nos señalen... dejemos que las personas hagan uso de la libertad que tenemos desde que nacemos, y es, el derecho a ser personas: a amar, a ser amado y respetado.
Tu hijo/a, tu padre, tu madre, tu amigo/a, tu hermano/a , tu tío/a pueden ser lo que deseen en la vida y sobre todo, personas de bien... como todos, estamos en este camino a la felicidad.
Si la felicidad viene de la mano de alguien del mismo sexo, es algo que con el tiempo será natural... ya la misma existe desde que el mundo es mundo: somos libres de amar y ser amados.
Viviana Vaisenberg
Terapeuta Cognitiva Comportamental
